La actriz y conductora de los tradicionales almuerzos televisivos, Mirtha Legrand, celebró sus 97 años de edad y recibió la visita sorpresiva de la actriz y también animadora televisiva Susana Giménez, el actor y productor de TV Adrián Suar, el cantante Jairo, su amiga Aída Elena «Coca» Calabró y su hija Marcela Tinayre, en su domicilio de la avenida del Libertador de la Ciudad de Buenos Aires.
«Me encuentra muy feliz y contenta, me encuentra muy bien», afirmó Legrand ante la prensa en la puerta de su casa en esta ciudad y, entre sus deseos mencionó que espera «que nos unamos todos los argentinos, para el país, y para mi, que siga disfrutando».
Luego agradeció «A Dios que me ha hecho vivir hasta ahora», afirmó entre los invitados que deseaba mencionó a su gemela y hermana: » Me gustaría una persona, pero ya no está en este mundo «Goldie» (Silvia Legrand), después aseguró que «hay que poner un poco de voluntad y no creer que el que piensa distinto es un enemigo».
«Vivo mi vida como si durara muchos años, lo mío lo de Mirtha Legrand es un milagro estar bien», afirmó.
Susana Giménez llegó de Susana Giménez a la casa de Mirtha y entablaron una conversación, a pesar de que suelen comunicarse casi a diario vía telefónica, mientras Adrián Suar expresó a su llegada dijo que: “Le regalé chocolates y mi presencia. Creo que voy a cantar con Jairo”, ironizó.
Además, entre los invitados asistieron los diseñadores Claudio Cosano y Gino Bogani, el programador de televisión y actor Pablo Codevilla, y la hija de Mirtha, Marcela Tinayre, entre familiares y amigos figuras del espectáculo y celebridades que asistieron a la cena para 45 invitados a la casa de la «Chiqui» para celebrar sus 97 años.
“Doy gracias al cielo llegar a esta edad y estar bien, eso es lo importante. Puedo caminar, mi médico me dice que soy una mujer sana”, manifestó en una entrevista en la puerta de su domicilio donde recibió a medios de prensa mientras dijo que necesita “que la gente me quiera, solo me gustaría que me recuerden como una mujer entusiasta, trabajadora y apasionada, porque tengo pasión por todo lo que hago».
Creo que en la vida hay que ser apasionado”, es otra de sus frases de cabecera en las que deja en claro los valores que siempre quiso transmitir.
De manera agregada, un detalle no pasó inadvertido, luego de que ella confirmara que pidió que no le hagan regalos: “primero, que está todo carísimo y segundo, no los quiero comprometer, pero estoy seguro que algunos van a traer”.
Mirtha Legrand agasajó en una cena íntima en su casa a 45 invitados, quienes fueron llegando al lugar. Desde la diva Susana Giménez, Suar, Jairo y Codevilla, quienes fueron llegando a partir de las 20.30. Uno de los primeros en llegar fue el cantante Jairo, junto a su pareja actual Laura. A dos años de la muerte de su esposa y madre de sus hijos.
También asistió, acompañada por el periodista, jefe de prensa y actor, Alejandro Veroutis, Aída Elena «Coca» Calabró, quien lució un pantalón y camisa blanca, y quien es íntima amiga de la cumpleañera.
Luego, Susana Giménez causó una revolución al llegar al lugar y explicó que su viaje sorpresivo desde Punta del Este: “Acabo de bajar del avión, ni en el free shop pude comprar (regalo). Vine de sorpresa, no sabe ella (Mirtha). Le deseo lo mejor, porque la amo. Tomé la decisión de venir cuando ella me dijo por segunda vez que venga».
A continuación, llegó Suar, el actor y productor ironizó con que a Mirtha: “Le regalé chocolates y mi presencia. Creo que voy a cantar con Jairo”.
Otro de los invitados fue el diseñador, Claudio Cosano, quien vistió a la conductora televisiva. Al llegar al festejo dijo de su trabajo con la actriz es de “hace más de 20 años que la visto ininterrumpidamente. Es la mujer más fácil, es facilísima, yo le llevo el vestido casi terminado. Ella se ríe porque le digo que tengo un maniquí de su cuerpo. Sé lo que le va a gustar o lo que no. Conmigo se animó a ponerse colores que otra figura tal vez no se animaría”.
Asimismo, la diva de los almuerzos pidió a sus invitados que no quería nada porque «está todo muy caro y no necesito nada, antes de explicar que “sí tengo deseos, pero me los guardo, no los digo. Es verdad que pedí que no me traigan nada, no quiero que se pongan en gastos”.
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